Contra todo temor; contra el peso de aquello
que, a falta de nombre peor, los hombres mal llaman ley;
Contra la tiranía del Credo, contra el ardiente
e inmundo credo del párroco, y las fauces de la Superstición.
Contra todos los grilletes creados por el hombre;
y el Infierno creado por el hombre…
Sólo, al fin, sin ayuda, ¡YO ME REBELO!Talbot Mundy, 1914
Hoy en día, desde nuestro punto de vista «milenial», es fácil echar la vista atrás y ver en el tumultuoso nacimiento del siglo XX una época marcada por la aventura. El cine y la literatura pulp nos han legado una imagen arquetípica del período y de los conflictos armados que culminaron en el estallido de la Primera Guerra Mundial. El mundo era aún susceptible a ser explorado, y un hombre decidido podía hacerse a sí mismo si no temía desafiar el orden establecido. Ése es el perfil de muchos de los héroes sobre los que podemos leer en la literatura popular del momento, pero raro es el caso en el que este perfil se aplica también a su autor. William Lancaster Gribbon (1879-1940), más conocido por su seudónimo literario Talbot Mundy, pertenece a ese grupo. Entre todos los escritores que publicaron su obra en las revistas pulp, Mundy es, sin duda, uno de los autores cuya propia vida supera a la ficción. Continue reading