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Hablábamos el otro día de la Antigüedad Tardía y del fascinante mundo de posibilidades que encarna como periodo histórico. Hoy, un botón: la Notitia dignitatum. Un documento que nos adentra en la organización administrativa del Imperio romano de principios del siglo V dC y que se erige como una suerte de radiografía del entramado organizativo del mismo, de arriba a abajo.
La Notitia dignitatum recibe su nombre de las primeras dos palabras del texto y ha llegado a nosotros a través de diversas copias de entre los siglos XV y XVII, la mayoría de ellas profusamente ilustradas. A lo largo de sus páginas, la Notitia desgrana los diferentes cargos administrativos y militares de ambas partes del Imperio romano en época de Teodosio y sus hijos. Así, vemos desfilar a los prefectos del pretorio, los vicarios y gobernadores provinciales, a los magistri equitum y militum, o a los distintos regimientos destacados en cada provincia del Imperio, con sus insignias y rangos.
La virtud más destacable de los diferentes manuscritos de la Notitia es la profusión de miniaturas que lo acompañan y sirven para ilustrar tanto las provincias romanas como las insignias de las distintas legiones acantonadas a lo largo y ancho del Imperio. Una fuente inagotable de motivos decorativos y de símbolos, algunos de los cuales tuvieron gran éxito en siglos posteriores, mientras que otros nos resultan hoy día incomprensibles. En la Notitia, por ejemplo, encontramos la primera representación del símbolo del Ying y el Yang tal y como lo conocemos.
Quizá en estos símbolos cuya explicación se han perdido subyace, precisamente, una de los mayores atractivos de la Notitia. El hacernos partícipes de un mundo hoy perdido, incomprensible en sus formas y expresiones, cautivador por lo que tiene de un pasado que ya poco nos dice de un mundo que no es el nuestro.
Esta entrada se publicó originariamente en Entre Historias el 4 de octubre de 2013
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